Como ya es una tradición, ayer la playa oeste de estacionamiento del Mendoza Plaza Shopping se convirtió en el escenario de la sexta edición de la Pisada de Uva de Orfila.
"Nos encanta el tiempo de Vendimia, porque hay muchos eventos para disfrutar. Siempre venimos a éste y más ahora que toca Altertango", comentaron Cecilia Guzmán y Mariana Ríos, mientras buscaban asientos que tuvieran una vista privilegiada.
El primer número, a cargo del músico local Daniel Vinderman, comenzó a las 21.20; cuando aún quedaban muchas de las 4.500 localidades sin ocupar. Poco a poco el lugar se fue colmando de mendocinos y turistas, tanto el sector de las sillas como el de las gradas.
Lo cierto es que muchos espectadores pasaron por los stands de comidas típicas para hacerse de la cena antes de que comenzara el show. Así, largas filas esperaron por los variados menúes, que iban desde el popular choripán al refinado sandwich de peceto. Según informaron los organizadores, el dinero recaudado por la venta de los vinos Orfila será donado a la Cruz Roja Internacional, para beneficio de los damnificados por el terremoto de Haití.
Por llegar temprano, algunas cortes departamentales encontraron sitios preferenciales en el sector vip, mientras que otras se resignaron a estar entre el público general tras haber reclamado en vano. Entre las privilegiadas, estaban las candidatas de Guaymallén, que arengaron con entusiasmo a su virreina: Silvina Muccio.
"Nosotras somos las más bullangueras", señaló Yamila Cataldo, aunque reconoció que tal vez no pongan el mismo ímpetu en aplaudir a su reina departamental.
La ex virreina nacional, Gisella Campos, fue la conductora, junto a Eber Ludueña, invitado especialmente en el año del mundial. "Aquí no importa el tamaño del pie, sino el ritmo y la gracia de las chicas", lanzó el cómico cuando la primera tanda de seis virreinas se disponía a comenzar su minuto de baile sobre la uva.
Las reinas departamentales observaron a sus coterráneas desde las primeras filas. Al ritmo de la música, éstas buscaron lucirse con coreografías, saltos y hasta largando racimos al público.
Mientras el jurado decidía quiénes pasaban a la ronda final, el conocido grupo local Altertango subió a escena e hizo de las suyas. El broche de oro de la velada fue la presencia de Los Pericos, que hicieron bailar y vibrar al público. Al cierre de esta edición, aún no se conocía la virreina ganadora. Gisela Manoni
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